ROMA, 26 Dic. 16 / 12:50 pm (ACI).- Cientos de católicos maronitas de la recién liberada Alepo (Siria), celebraron ayer la Misa de Navidad en la catedral maronita de San Elías, que quedó en ruinas debido a los bombardeos y permaneció cerrada durante los cuatro años en que las fuerzas del gobierno y los grupos yihadistas y rebeldes se disputaron el control de la ciudad.
La Eucaristía comenzó a las 11:00 a.m. (hora local) y fue presidida por Mons. Joseph Tobji, Arzobispo maronita de Alepo. En el centro del templo, en medio de los escombros de piedra y bajo el techo destruido, los fieles armaron un hermoso pesebre con la Virgen María, el Niño Jesús, San José y la estrella de Belén. El altar fue decorado con flores blancas.
Los asistentes fueron ubicados en las partes laterales de la catedral, frente al altar y en la parte superior. Tuvieron que sentarse en sillas de plástico porque las bancas estaban destruidas. En la celebración se entonaron villancicos en inglés, francés y árabe.
Después de la Misa, un grupo de líderes musulmanes visitó la catedral y un cristiano que acudió como representante del Gran Mufti de Siria transmitió sus saludos por Navidad. Al terminar se reunieron con Mons. Tobji, y varios sacerdotes.
La catedral maronita de San Elías, ubicada en el barrio cristiano de Jdeydeh, ha sufrido bombardeos en tres ocasiones durante los cuatro años del conflicto en Alepo. El templo actual fue construido en 1873 sobre una pequeña iglesia del siglo XV y es considerado como una de las iglesias más antiguas de Medio Oriente.
En la noche del 24 de diciembre, los cristianos de Alepo cantaron villancicos en las calles y se reunieron en torno del árbol de Navidad para recordar a las víctimas de la guerra.En el año 2012 comenzó la batalla de Alepo en la que se enfrentaron los grupos rebeldes y terroristas, como el Frente al Nusra, Frente Islámico y el Ejército Libre Sirio, contra el ejército del gobierno sirio. Esta es una de las ciudades que ha sufrido más los estragos de la guerra civil que estalló en el país el año 2011.
Durante el conflicto, Alepo quedó dividida en dos. La parte oriental estaba dominada por los grupos rebeldes y yihadistas, mientras la zona occidental permaneció bajo control del gobierno.
Ayudado por la aviación rusa, el régimen de Bashar Al Asad logró derrotar a sus opositores, iniciándose con apoyo de la ONU y organismos internacionales, la evacuación de los guerrilleros y civiles que deseaban abandonar la ciudad.
En declaraciones a la prensa, el ministro de defensa ruso, Serguéi Shoigú indicó que se evacuó un total de 34 mil personas, incluyendo 8.500 niños.
Ayer en el Ángelus dominical en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco recordó a los cristianos de Medio Oriente y pidió para se alcance la paz.
Fonte: ACI Prensa
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